Cuando el sueño me invade,
parece que la realidad se desdibuja.
Todos los matices no existen,
no se define la materia de la idea.
En un momento, sueño con sombras
que me persiguen con escopetas.
En otro, se caen unas lanzas.
Luego, el zeppelin donde está la soledad.
La playa del sueño, luego el zeppelin.
Todo se sigue abalanzando en la memoria,
donde ni un Ángel, ni un Dios,
es capaz de modificar impactos.
¿quién eres tú, personaje?
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