Es una razón
para que no pase.
Lo que tenga que suceder
no está en nuestro puño,
nuestro cerebro, razón;
sino en nuestro espíritu.
Mas fácil es huir que
volver atrás la mirada
y rectificarse; lo sé.
Pero es mas cómodo
engañarse.
Mas simple poner tapas
a los agujeros del corazón
que sanar compadeciendo.
Aunque pase lo que pase,
y no sea cierto que me ames,
en un pedazo
de mi deshojada y ruinosa alma
corroída por el sabor del tiempo y reloj,
te seguiré añorando;
serás tan visible como la Luna
en una noche de esas
que me paso viendo el cielo violeta.
Serás tan clara como el viento del norte.
Serás tan triste,
serás un páramo;
no, serás escarchados campos.
Serás lo que yo quiera
porque de mis fantasías
soy dueño.
Aunque en mi vida
sea tu siervo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Decime qué pensás, que sentís, si te gusta o lo que quieras!